
¿Han escuchado que la pintan calva?, pues así la pinten con pelos lo cierto es que a mi en la vida me preocupa muchísimo más dejar pasar una oportunidad o no intentarlo, que el tiempo que la disfrutaré o si fallaré o me equivocaré al tomar esa decisión. Equivocarse es el riesgo implícito por estar en este camino llamado vida.
Siempre recuerdo algo que leí, que parafraseando decía así “nadie al filo de la muerte lamenta sus errores, pero todos lamentan lo que no se atrevieron a intentar”.
Esa jamás será una asignatura pendiente para mi, si me dijeran, defina con un gerundio su vida, sin duda es “viviendo”, vivir es reír, llorar, equivocarse, morirse de miedo pero igual hacerlo, pensar “qué bolas tienes tú Thamara, ahora dizque escritora”, pero igual escribí un libro desnudando el alma y como me dijo mi amiga del alma Marimonti “tú sí eres arrecha, hasta la cara tuya le pusiste a tus historias”, refiriéndose a que la portada de mi primer libro tiene mi foto.
Es que si me voy a atrever, es con todo, que el susto valga el esfuerzo. Si vamos a soñar, ¿qué más da que el sueño sea enorme o pequeñito?, de cierta manera vivir con un sustico en el estómago podría ser la señal de que estamos viviendo del carajo y sin fecha de caducidad. Créanme que después de los 50, la cosa se pone mejor (sí cuidas tu salud claro está, comentario pajúo pero cierto).
Por ejemplo, si quieres invitar a alguien a salir, ¿qué es lo peor que podría pasarte?, que te diga que no, si vas a invertir un dinero, lo peor que podría pasar es que lo pierdas todo o una parte, si quieres llamar a un nuevo cliente y te da temor, lo peor es que te diga que no está interesado en tu producto.
Pero, ¿y si te dicen que sí y es la historia de amor de tu vida?, ¿y si ese negocio te hará prosperar en dimensiones inesperadas?, ¿y si ese nuevo cliente compra tu producto y te refiere a un montón de clientes más y hace que tus ingresos se tripliquen?, ninguno de los dos escenarios está garantizado, pero aun cuando pase lo peor, haberlo intentado te hará sentir en paz.
Frecuentemente escuchamos “en la vida o se gana o se aprende”, y claro, cuando lo que sentimos es que hemos perdido, de momento no vemos el aprendizaje en ninguna parte y hasta rabia nos da esa frase. Pero quisiera saber, en el ejemplo de la inversión, si volverías a invertir en lo mismo y en las mismas condiciones, ¿te das cuenta?, sí aprendiste algo.
Yo me estoy gozando tanto esto de escribir, que la Thamara López del futuro, estaría muy pero muy molesta con la Thamara del 2020 si no hubiese dado el salto de fe y comenzado a escribir. Yo aún no sé cómo va a salir esto, pero si ya lo estoy disfrutando, esto ya está funcionando para mi.
Mi libro ya está en Amazon, está en preventa, y sale oficialmente el 02 de Octubre 2022, el día del cumpleaños de mi hija, y de verdad casi no lo puedo creer. No sé nada del mundo editorial, no tengo idea como hago lo que estoy haciendo, parece magia, todo fluye, yo escribo, me río, soy feliz, y mi primer libro Escribir, Soltar, Sanar, ya está en Amazon, es todo lo que sé.
Yo he sido una mujer muy atrevida, he hecho cosas realmente imprudentes, alocadas, absurdas, pero Dios siempre ha puesto orden en mi caos, y victorias en mi vida. Así que prometo seguir igual de torpe y osada, igual de feliz y confiada, porque vivir con un sustico en la barriga es sabroso y mantiene a mi niña interior, muy despierta y muy feliz.
Total, lo que a mí me falta, Dios lo tiene de sobra, y Él y yo siempre andamos juntos 🍀

GRACIAS Wom, estas reacciones a mis líneas realmente me llenan y me alientan. Eres una persona única, muy especial, sin fecha de vencimiento. Un abrazo apretao para ti.
Narrativa muy, pero que muy adecuada para personas como yó que nos importa un bledo el «que dirán» mis amistades…
apenas hace horas te conocí pero creo que seguro en otras vidas estuvimos conectados ya que la dualidad en muchas facetas nos hace cómplices en sentimientos y pensamientos nada dispares, siento que eres la parte femenina de mi ser, y me inclino ante el Creador por cruzarte en mi vía hacia la superación personal de nuestra existencia terrenal.
«El Wom»